El estado de Veracruz se encuentra lleno de leyendas. Una de ellas es la de la sirena de Tamiahua, la cual relata un hecho paranormal protagonizado por una hija y su madre.
Los veracruzanos han relatado este hecho como algo terrorífico, pues quienes fueron testigos señalan que la imagen de lo sucedido nunca pudo ser borrada de sus memorias.
A continuación te contaremos una de las historias más contadas en el municipio de Tamiahua, misma que según los lugareños, sigue causando escalofríos al escucharla.
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La sirena de Tamiahua, una niña convertida en demonio
Los habitantes cuentan la historia de Damasia, una mujer sumamente religiosa que había quedado viuda y solamente vivía con su hija Irene, una niña hermosa de piel morena, ojos verdes y cabello oscuro.
Al profesar su religión, ambas asistían a la iglesia para hacer ayuda comunitaria para socorrer a los que menos tienen durante la temporada de Semana Santa.
Un jueves santo ocurrió lo inimaginable. Al llegar de una actividad, Irena regresó sucia y quería bañarse, a lo que su madre le dijo que no estaba permitido, ya que durante esa semana estaba prohibido bañarse.
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“Mamá, que me perdone Dios pero yo aunque sea me voy a lavar la cara”, dijo la niña mientras se dirigía al pozo que estaba en el patio de su vivienda con una barra de jabón.
Sirena de Tamiahua: Irene fue arrastrada hasta la laguna
Minutos más tarde, Damasia escuchó los gritos de ayuda por parte de su hija, a quien, según la leyenda, la arrastró una enorme ola provenida de dicho pozo y la transformó en un monstruo de boca ancha y grandes ojos.
Rápidamente sus piernas se convirtieron en una cola de pez con escamas para después ser arrastrada hasta la conocida laguna de Tamiahua frente a los ojos de su madre.
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Para tratar de rescatarla, lugareños tomaron una balsa de que se encontraba en el agua y remaron para buscarla, sin embargo, este demonio saltó en ella con una sonrisa burlona y cánticos extraños; cuando se dieron cuenta de esto, decidieron desistir de su búsqueda.
Damasia sigue buscando a Irene en Tamiahua hasta la actualidad
Destrozada, Damasia quedó muerta en vida al ver en lo que su hija se había convertido. Por esto, se dice que cada jueves santo se le escucha buscando a su hija en el agua con la finalidad de llevarla con ella.
Pero, según la leyenda, Irene ya no es más una niña, ahora se ha convertido en una sirena maligna que ahoga a quienes se atreven a verle el rostro cuando están en la laguna.
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