El cuerpo de Rosa Isela fue velado toda una noche en casa de sus familiares en una colonia popular de la ciudad de Veracruz.
La trágica muerte de esta joven de 20 años quien en su vientre llevaba una bebé de 8 meses de gestación ha conmocionado a la sociedad.
Rosa Isela tenía sueños por cumplir
“Pues yo creo que como a cualquiera aunque no sea familiar, es un caso muy impresionante y doloroso. Y ella la verdad esperaba a su bebé con mucha ilusión, era una persona muy fuerte, trabajadora, estudiosa. Ella quería ser educadora. Había hecho un curso para eso, estaba esperando que terminara la pandemia para poder encontrar una oportunidad y pues le arrebataron la vida.”, expresó Magui Contreras, prima de Rosa Isela.
Te recomendamos: Detienen a youtuber acusado de violación y corrupción de menores
Sus vecinos y familiares temen que este caso no sea el único.
“Ahorita es ella, al rato puede ser otra. Yo tengo una muchacha de 20 años y no me gustaría que pasara lo mismo. Entonces que no se quede esto así.”, Guadalupe, una de las vecinas que conocía a la víctima.
La Fiscalía General del Estado ha informado que efectivamente no se trata del único hecho con violencia contra mujeres embarazadas, pero descartó que el caso de Rosa, este vinculado con los anteriores.
“Desde el 2018 fiscalía solamente tiene tres carpetas de denuncia de chicas embarazadas que fueron desaparecidas y no podríamos hablar de un tema así, este caso no podemos contabilizarlo o pensar que fue de esa manera”, explicó Verónica Hernández, Fiscal General del Estado.
Te recomendamos: Se ahogan 14 personas durante un bautizo; los arrastró la corriente
El cuerpo de Rosa Isela partió al panteón cuatro horas después de lo previsto. En el camino sonaron voces de justicia. Al atardecer el féretro de la joven asesinada llegó a la comunidad de Plan de Manantial en el municipio de Paso de Ovejas. Entre llantos y oraciones, sus familiares volvieron a pedir que se investigue a fondo el caso.
“Que nos hagan justicia porque ya estamos hartos de que cada día hay desaparecidos y no hacen caso, queremos que haya autoridad que nos cuiden”, señaló una de sus familiares que asistió al entierro.